“Era el primer tiempo y por el calor, el árbitro nos dio unos minutos para tomar agua. Aprovechamos de hidratarnos y realizamos algunos cambios que nos posibilitó recuperar el balón y el juego, algo que nos caracteriza. Este era un partido especial porque conozco a varios de Caudal entonces tenía muchas ganas de jugar y de marcar. El partido fue difícil para nosotros, íbamos perdiendo 0-1 y salió una jugada rápida al medio; entre paredes y toques certeros quedó el balón en ofensiva en pies del puntero de nuestro equipo. Yo, que recién había entrado, estaba fresco y fui a acompañar la jugada. Y justo me llegó un pase en el área y quedé con el arquero de Caudal frente a frente. Sin pensar definí de zurda cruzado y al pegarle al balón me caí, y al pararme, veo que fue gol. En ese momento me sentí muy contento, llevaba harto tiempo sin marcar y meter el gol del empate en el partido, para luego ganarlo, me puso aún más feliz. Quiero agradecerle a mis compañeros y al equipo que semana a semana armamos un grupo muy especial que esta ahí cada partido motivando desde afuera”.